Una de las maravillosas joyas de la diseñadora Naomi Kizhner. se inserta en una vena y el flujo sanguíneo se utiliza para hacer girar una rueda dentada.
De niños nos reíamos: “¡Homero, qué perdedor eres!” y ahora miras: tiene trabajo, una esposa amorosa, hijos geniales, una vida llena de aventuras, incluso ha estado en el espacio... ¿y quién es el perdedor aquí?