A veces los compañeros de mi hija vienen a visitarme y me dicen que quieren jugar en la consola. Como cualquier padre, yo, por supuesto, estoy un poco nervioso: ya sabes, tienen 13 años, las hormonas pueden incluso romper mi consola...
La hijita se acerca y le susurra al oído: ¡Papá, ahora te diré una cosa, te estás volviendo loca! El padre, carraspeando, responde: gracias hija... no hace falta... ¡ya estoy loco!
-Papá, quiero casarme. -Discúlpate primero. -¿Para qué? - Lo siento. - ¿Pero para qué? ¿Qué he hecho? -solo discúlpate. -pero… ¿cuál es mi culpa? - disculparse. -¿¿¿Para qué??? - disculparse. -¡Por favor, al menos dime el motivo! - disculparse. -vale papá...perdón!!! -Ahora estás listo. Tu entrenamiento fue exitoso. Cuando aprendas a disculparte sin ningún motivo, ¡podrás casarte!
- Hola Sarochka, ¿estás lista para trabajar con la boca hoy?;) - Igor, Sarah en la ducha, este es su padre y estoy muy interesado en saber qué hará con la boca. - ¿No te lo dijo? -¡¡No!! -hoy vamos a un club de karaoke :)